Desastre en Cobquecura, epicentro de terremoto en Chile


Cobquecura perdió más del 95 por ciento de su patrimonio histórico con el terremoto (jueves, 04 de marzo de 2010 por escrito por M.E.Vega en www.tribunadelbiobio.cl)

Sus hermosas y famosas casas de adobe que le permitieron convertirse en la primera Zona Típica de la región del Bio Bío, quedaron pulverizadas a raíz de la furia del terremoto del 27 de febrero. Cobquecura perdió así gran parte del patrimonio que le ha dado su identidad. Así lo reconoce con tristeza su alcalde Julio Fuentes, quien busca las formas de levantar a su comuna.

En la plaza de Cobquecura, encontramos a su alcalde Julio Fuentes. Se nota cansado, los ojos enrojecidos por la falta de sueño. Era el domingo 28 de febrero. Habían pasado poco más de 36 horas del terremoto y reinaba el desconcierto y la intranquilidad.

El edil coordinaba las acciones de recolección de agua para distribuir a la población. El líquido se extraía con una bomba desde una captación subterránea. El cielo estaba nublado, amenazante.

“A la vista está lo que nos ocurrió”, empieza a contarnos tras identificarnos. Aparenta tranquilidad, pero se nota afectado. Y no es para menos. El terremoto dejó a Cobquecura (comuna balneario de la región del Bío Bío) con gran parte de su principal atractivo turístico en ruinas: sus centenarias casas de adobe.

“Lo lamentable es que esta comuna era Zona Típica por la condición de sus construcciones, nos damos cuenta que tenemos 95 por ciento de destrucción del patrimonio en estas casas en el casco histórico protegido histórico de 6 hectáreas y que habrá que demoler el cien por ciento, por ese lado estoy muy apenado”, nos dice con evidente pena.

Aunque de inmediato agrega que hay que ir viendo la forma “de levantarnos y tratar de volver a ser lo que fuimos a pesar de que la magia que tenía de su tipo de construcciones ya no va a estar. Quizás el patrimonio principal de la comuna se acabó con este terremoto”.

Es que uno de los atractivos principales de Cobquecura estaba en sus construcciones de adobe, en el uso de piedra laja en muchas de ellas y en ese aire especial que le impregnaba al pueblo y que era muy apreciado por quienes lo visitaban.

Y aunque como comuna turística va a seguir, pues tiene hermosas playas y parajes, además del Santuario La Lobería, lo cierto es que gran parte de su identidad desaparece con la destrucción provocada por el terremoto.

“Como comuna turística vamos a seguir, pero el tipo de construcción, esa competencia que tenemos respecto de otras comunas que tienen costa, la identidad que eso nos daba, ya no va a estar”, recalca.

A eso se agrega que no hay subsidios ni aportes especiales para que los propietarios de las viviendas dañadas puedan reconstruirlas o repararlas. La condición de Patrimonio Histórico lo impide. “Quizás si estas casas hubiesen tenido una mantención, una ayuda del estado por haberse declarado Patrimonio Histórico, podrían haber tenido una mantención en otras condiciones y más se hubiesen salvado”.

“Cualquier otra comuna puede reconstruirse en mejores condiciones con casas más modernas pero a Cobquecura se le saca este tipo de construcciones y ya no va a ser el mismo, puede ser algo más moderno pero igual que otros balnearios, lo que a nosotros nos interesa es que se hagan las cosas bien, que existan leyes que lo garanticen, que por tener la condición de Zona Típica va a tener una línea de financiamiento para que la gente pueda reconstruir y las fachadas que existen y estén en condiciones, se puedan mantener”.

En medio de la adversidad de azota a Cobquecura, su alcalde reconoce que se ha reforzado la solidaridad y el espíritu de cooperación. “Somos una comuna pequeña en que estamos acostumbrados a que todas las cosas salgan con sacrificio”, recalca.

Es así como desde el mismo día del terremoto, gran parte de los habitantes de la zona baja de la comuna, unas 4 mil personas, se concentraron en unos siete campamentos en los sectores altos, debido a las precarias condiciones en que quedaron sus viviendas, unos y al temor a nuevos maremotos, los que viven más cerca de la playa.

“Nos unimos y pedimos sitios particulares, hemos tenido la posibilidad de preparar fuego, de compartir alimentos. Los vehículos municipales han estado a disposición de los afectados para que vayan a sus casa a ver cómo están y si pueden sacar algo”, explica Fuentes, quien junto a su familia también permanece en uno de esos campamentos en las afueras de Cobquecura.

Y mientras piensa cómo su comuna recuperará lo que le ha dado identidad desde hace más de 200 años, el alcalde se preocupa de buscar los recursos y elementos para resolver las necesidades inmediatas: baños químicos, tiendas de campaña, colchonetas, sacos de dormir.. Es que no cree que los campamentos se levantes antes de una semana. No sólo por el temor, también porque quienes perdieron sus casas no tienen dónde vivir. Es lo que se vive desde el sábado en Cobquecura, Zona Típica, Santuario de la Naturaleza, Patrimonio Histórico, donde el terremoto del 27 de febrero quedará para siempre marcado en la historia de la comuna y sus habitantes.